EL MOVIMIENTO. TODO CAMBIA.
El dolor es la conciencia de la responsabilidad de nuestros actos, es el miedo a las decisiones, y es que mientras dudamos, la vida y la muerte, el principio y el final.... se mezclan entre si creando un camino de incertidumbre.
La inseguridad nos asusta, y es que no comprendemos al miedo, y por eso le damos mil formas, y por eso buscamos llegar a algún lugar, y por eso, y por eso... Y es que, si, la existencia es fluir... pues, que mejor forma de hacerlo que aceptando el movimiento como algo que forma parte del lugar de donde procede todo, ese es nuestro lugar, y no una forma que nosotros nos inventamos para sentirnos mas seguros.
Y miramos en nuestro interior, y vemos que nada sabemos, nos preguntamos como es posible sentirse un día feliz y otro desgraciado, confundimos los sentimientos con los pensamientos, lo que hacemos no es lo que intuimos... nos arrastra el imán de la sin razón, nos pone a prueba, siempre nos falta algo, algo que intuimos que existe, pero que solo alcanzamos cuando llega el caos, y flotamos por encima de todo.. como cuando interiorizamos meditando, y los pensamientos no son una molestia porque no estamos constantemente en tensión intentando modificarlos... hartos de tanto, de no encontrar respuestas que nos satisfagan, solo nos queda existir tanto en la muerte como en la vida, afrontando sus consecuencias.
La inseguridad nos asusta, y es que no comprendemos al miedo, y por eso le damos mil formas, y por eso buscamos llegar a algún lugar, y por eso, y por eso... Y es que, si, la existencia es fluir... pues, que mejor forma de hacerlo que aceptando el movimiento como algo que forma parte del lugar de donde procede todo, ese es nuestro lugar, y no una forma que nosotros nos inventamos para sentirnos mas seguros.
Y miramos en nuestro interior, y vemos que nada sabemos, nos preguntamos como es posible sentirse un día feliz y otro desgraciado, confundimos los sentimientos con los pensamientos, lo que hacemos no es lo que intuimos... nos arrastra el imán de la sin razón, nos pone a prueba, siempre nos falta algo, algo que intuimos que existe, pero que solo alcanzamos cuando llega el caos, y flotamos por encima de todo.. como cuando interiorizamos meditando, y los pensamientos no son una molestia porque no estamos constantemente en tensión intentando modificarlos... hartos de tanto, de no encontrar respuestas que nos satisfagan, solo nos queda existir tanto en la muerte como en la vida, afrontando sus consecuencias.
Ana Mª
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